Lo primero que llama la atención en las fotografías que se exhiben en la muestra “Maternajes Transfronterizos” de Gabriela Rivera Lucero, es que las fotografías muestran las huellas de una intervención sobre las mismas. Lo ha explicado la propia artista, que los negativos fueron introducidos antes de su revelado en un liquido en el que se habían bañado objetos y plantas vegetales relacionadas con la experiencia vital de las mujeres fotografiadas. Hay una llamada a la incorporación de recuerdos e imágenes que nos hablan de otras cosas que están más allá de la imagen que se muestra, como indicios de algo que no se ve pero que se puede intuir. Con ello el trabajo de Gabriela se inscribe en una corriente de pensamiento y de obra que busca descubrir el pasado en las pequeñas señales que se muestran ante nosotros, muchas veces sin haber sido convocadas.