Nuestro patrimonio arquitectónico es un elemento de identidad cultural y de gran riqueza colectiva. El estudio del mismo debe ser importante para la difusión, conocimiento y disfrute de las futuras generaciones. Son muchos los edificios con interés en la ciudad de Valencia que no disponen de un adecuado estudio. De igual modo ocurre con un gran número de arquitectos, con obra de gran trascendencia en esos años, que no tienen una monografía propia.